martes, 12 de agosto de 2014

ROPA

  Buenos días, ya estoy algo mejor, nada como un buen sueño.
     He soñado el típico que tengo de vez en cuando, el de comprarme ropa, ya sé que parece una tontería...Bueno todo empezó un día que fui al cine, debía tener unos diecisiete o asi y !fui con una chica¡, no lo recuerdo bien pero creo que de alguna forma me lo pidió ella (yo ere mas lelo que un zapato), evidente la peli me gustó, pero lo que más, la escena en que Gere, por cierto el film era "american gigoló", se vestia, como escogía la ropa, el armario, etc...
   Pues cuando empezé a trabajar y ser solvente, me instalé un armario y cada temporada, "la compra de ropa", era una gozada, en los ochenta la obsesión por las marcas no era tan obsesiva como ahora, que no comprendo, bueno modas, entonces sí, algo caía de Armani, Zegna, Boss, pero en definitiva la gracia era la tienda, durante muchos años, hasta que cerró, compraba en una de la calle Provenza o Mallorca, no recuerdo, José Tomás era el nombre de ésta. Recuerdo al entrar, el parket, el olor de ésta, de la ropa nueva...fuí tantas veces que tenia mi propio "vendedor", jeje, lo dejaba todo, extendía una alfombra y ale, primero escogíamos cuatro o cinco americanas (aún no llevaba trajes), tres camisas para cada úna, todo en una mesa y unas tres corbatas para cada pareja (algo así) el diseñador de ésta tienda o quien fuese, diseñaba, clásico (no), a la temporada, y una linea algo mas...transgresora sin pasarse, eso caía por descontado, bueno pues me lo miraba, me decía los colores, pues como sabeís soy daltónico, me aconsejaba y escogía dos o tres américanas, camisas y varias corbatas, y los pantalones a juego y ya está, tampoco entonces me parecía gastar una barbaridad (ahora sí), pero ayudaba en mi trabajo, seamos realista, buena estética (llámese percha), y estilo, dice mucho...
   Luego por las matinas, después de ducha y aseo iba a mi armario y venia la gozada de escoger...de alguna forma, ya decidiamos la compra de la ropa (con el vendedor), algo combinable, además con el tiempo adquirí la capacidad de lo que pegaba y no, y las variaciones eran bastantes. Siempre caia alguna marca, pero era lo de menos.
   En fín "batallitas" del abuelo...Ahora...bah que mas da.
  Por cierto, yo no era gigoló...je.

No hay comentarios:

Publicar un comentario